Apuesto a que a todos quisiéramos tener los pies calentitos en invierno, como si estuviéramos frente a la estufa sin tener que ponernos dos pares de incómodas medias ¿verdad que sí? Pues les cuento que esto es posible e incluso pueden prescindir de las medias y a la vez aportar salud a nuestros olvidados miembros inferiores.
Pensarán que estoy delirando o que ando con una bolsa de agua caliente para todos lados... pues es que uso plantillas rellenas de canela en el calzado!
La primera vez que las compré lo hice por curiosidad y novelería, y nunca pensé que estas plantillas tuvieran tantos beneficios reales; básicamente generan un efecto relajante en la planta del pie y activan la circulación.
Al mejorar la circulación sanguínea evitan los molestos calambres y disminuyen la congestión de várices.
Esta activación de la circulación sanguínea es lo que evita que tengamos los pies fríos, de manera inmediata, y es el motivo principal por el que las uso. Luego descubrí que mis calambres desaparecieron por completo, algo que padecía casi diariamente, especialmente en invierno, por lo tanto estoy fascinada con este resultado!
De hecho ahora soy capaz de usar botas sin medias y tengo los pies calentitos, secos, cómodos y libres.
La canela posee un gran poder de absorción de la humedad que se genera habitualmente en el calzado fabricado con plantillas sintéticas, y la verdad que es bastante ingrato sentir los pies húmedos.
De esta forma, y sumándole el poder antimicótico de la canela, se evita la aparición de hongos y mal olor en los pies, por el contrario, los tendremos con un aroma super agradable y duradero.
Son muy cómodas y acolchonaditas, ideal para calzado con suela muy fina, de esos que son muy bonitos pero con los que puedes llegar a sentir cualquier piedrita que pisas, lo cual es muy incómodo por cierto.
También tienen propiedades anti-inflamatorias por lo que son muy recomendadas para atletas o si simplemente hacemos largas caminatas.
La vida útil de estas plantillas si bien es relativa, yo diría que es de un mes o mes y medio aproximadamente; depende del cuidado que tengamos. Lo mejor es retirarlas del calzado cuando no las usemos, colocarlas nuevamente en el envase original, cerrarlo muy bien con una pinza o un palillo de ropa y volverlas a colocar en el calzado al día siguiente o cuando las necesitemos.
Ya compré mis plantillas para toda la familia por tercer año consecutivo, y este año increíblemente las conseguí más económicas en otro comercio, a $150 pesos uruguayos. Habitualmente las compro antes, pero este año el otoño ha sido muy cálido en mi país, pero ahora si estoy lista para esperar los días fríos que pronto vendrán.
Si no puedes conseguir las plantillas, intenta esparcir un poco de canela rallada o en polvo en tu calzado, como si fuera talco. Aunque no se logrará la comodidad de la plantilla, al menos tendrás los pies más calientes.
Aquí la lista completa de beneficios:
Espero que las disfruten tanto como yo!
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